“Leo habló sin temblor: —Podemos probar otra cosa. Me quedo en defensa. Nadie pasa fácil. No usaré las manos. Me coloco y ya.”
El equipo del recreo – Xavier Dueñas
📖 ¿Cuánto cambia la convivencia cuando dejamos que cada persona aporte su manera única de hacer las cosas?
Muchas veces creemos que hay una sola forma de participar, de jugar o incluso de trabajar. Sin embargo, cuando damos espacio para que cada persona aporte su mirada, el grupo crece de maneras insospechadas. En el patio, como en la vida, abrir lugar a lo distinto es transformar un grupo en equipo, y un juego en experiencia compartida.
Este texto forma parte del cuento “El equipo del recreo”, donde Marta y sus amigos descubren que incluir las habilidades de cada uno fortalece al conjunto.